Casa Carmen

Ubicado en medio de las calles adoquinadas de la ciudad de San Miguel de Allende, declarada Patrimonio de la Humanidad por la UNESCO, le espera una oportunidad verdaderamente extraordinaria: la adquisición de una joya histórica del siglo XVIII que atrae a aquellos con una inclinación por la elegancia atemporal y el rico patrimonio.
Esta rara ubicación de propiedad colonial fue parte del diseño urbano original de esta ciudad histórica y está a solo unos pasos de la emblemática parroquia con su jardín arbolado, un lugar de reunión popular tanto para locales como para turistas.

Al atravesar las imponentes puertas de madera talladas a mano, serás transportado instantáneamente a un reino de encanto, un santuario de serenidad escondido a solo unos momentos del vibrante corazón de San Miguel. Ante tus ojos se despliega un amplio patio interior, pavimentado con las losas originales, adornado con una antigua fuente central cuyas aguas caen en cascada con suave gracia. Imponentes limoneros y una flora meticulosamente cuidada pintan un cuadro pintoresco, todo enmarcado por el abrazo de una elegante columnata que sostiene arcos de piedra. Al caer la noche, sutiles luces revelan las intrincadas maravillas arquitectónicas, lanzando un hechizo de romántico encanto español sobre los alrededores.

Esta residencia histórica ha sido propiedad de una familia local desde 1958, y han conservado con amor su esencia y originalidad como un encantador hotel boutique. Con once habitaciones con baño, siete de ellas con vistas directas al patio, el diseño irradia simetría clásica, cada puerta ancha está coronada por dinteles desgastados por el tiempo. Aquí, el patio central se erige como el corazón social, haciéndose eco de las tradiciones consagradas de la vida diaria y la conexión humana.

Con vista a este espléndido patio, un opulento comedor atrae a solo unos pasos de una cocina tradicional de estilo colonial, mientras que un salón íntimo exuda una discreta elegancia de una época pasada. El interior, un testimonio elocuente de sus orígenes coloniales, promete una conversión moderna perfecta, asegurando una elegante combinación de pasado y presente.

A través de un antiguo corredor de piedra, se encuentran cuatro suites adicionales ubicadas entre un pequeño jardín rodeado de enredaderas centenarias que rodean una fuente en la pared de azulejos.

Un susurro de la historia, esta es una oportunidad única y poco común de poseer una parte de la narrativa de San Miguel de Allende. Es una invitación a darle vida a una obra maestra atemporal, a ser el guardián de su pasado histórico y a crear un futuro impregnado del encanto de este tesoro de la UNESCO.

Esta propiedad icónica es perfecta para continuar la tradición de un hotel boutique o para volver a convertirse en una residencia privada, una casa conceptual o un club privado. En una ubicación privilegiada en esquina, actualmente alberga un espacio comercial independiente que podría incorporarse nuevamente al edificio original. Tenga en cuenta que la propiedad se vende amueblada con excepción de los cojines y textiles únicos, cortesía de Roma Quince de Deborah Salmon Villarreal, Ciudad de México y San Miguel de Allende.

Cortesía de San Miguel Sotheby´s International Realty.